lunes, 12 de febrero de 2007

Ilha Grande, hermosa, hasta con lluvia y nube






Angra dos Reis, lluvia y día negro

Pan De Azúcar, Río



Del cristo se ve el Pao, y del Pao el Cristo... igual de buenas, la ciudad siempre a los pies, genial vista, mar más cerca... abajo la hermosa playa de Botafogo.
Luego de 35 reales en ventanillas, uno sube en multitud sonriente al teleférico del Pan de Azucar, son dos paradas, la fina en la cumbre del Pan y una previa sobre otro esbelto monte (perdón que no tenga su nombre a la mano, ya despues me pongo al día). La vista aquí también grandiosa. Snacks y miradores acompañan el andar. Se vuelve a subir en el Teleférico y ahora si estamos en lo más alto, desde donde el Cristo Corcovado parece pendiente de crucifijo.
Aunque sea cara la cerveza aquí, la vista lo vale... una lata y a brindar con la ciudad. Estuvimos horas aquí, una tomado fotos otras 4 respirando.
















Cristo Corcovado, Río





Hay comites de taxis que te llevan al cristo por 15 reales..., el tour oficial cuesta 36. Diferencia? el chuchu, un simpático tren atestado de cámaras y ansiedad turística que sube desde las faldas del Monte Corcovado, con una sola parada para que unos morenos armados de música y ritmo aborden y alegren. Al final llegas al Cristo igual, la diferencia es el medio, depende de los gustos, y el bolsillo. La vista es impresionante, el Cristo no, solo esta bueno. Ver Río desde la alturas es lo mejor, increible ciudad.

Playas salpicadas de rocas verdes, gigantes, caprichosas y dispersas en un desorden que armoniza con el color de su cielo y sus rascacielos, modernas calles y esbeltos puentes... es realmente genial. Lo mejor del Cristo es su fortuna..., contemplar esa belleza todos los días.

Río de Janeiro, en Febereiro


Llegamos a Río de Janeiro volando. Era mejor entrar a la ciudad por los aires, para que el Cristo nos reciba con un abrazo y no mirándonos de arriba hacia abajo.
Además por tierra eran 20 horas a 250 reales el pasaje!!!... aerolineas Gol no sllevó en 2 horas y por sólo 170 reales... así pasa en en Brasil, a veces las aerolineas se tornan locas y cariñosas, hay que estar atentos a esto.
No sabíamos mucho de Río, sólo que era una ciudad preciosa. Cierto, se nota al caminar por sus calles y se certifica al verla desde las alturas del Pao de Açucar y el Cristo Corcovado.
En el aeropuerto nos informamos bien. la oficina de información turística allí te abra el ojo turístico, muy buena infor, buses, lugares, precios, mapas... luego de 15 minutos lo sabíamos todo. Nos fuimos con datos y besos (muy amables las chicas) directo a copacabana. Nos quedamos allí en un hostel cerca a la playa, en la rua Santa Clara. 30 reales habitación compartida, un sitio común para el mochilero, salvo que aquí el uso del internet se cobraba aparte... otra cosa rara, los camarotes eran de a tres, como nichos de cementerio popular.
Nos contó Víctor, encargao de recepción, que en los siguientes días, en pleno carnaval, el alojamiento subiría al gordo precio de 120 reales por persona!!!!, menos mal que para esas fechas la gente anda algo ebria, así no estarían tan al tanto de lo que estan pagando, menos sufrimiento.
Río es una ciudad bonita, mucho. Modernos edificios desperdigados entre jorobadas montañas color esemeralda observan las generosas playas desde donde el carioca mira el mundo con una particular alegría. Todos están en sus orillas, pero estas no se ven atestadas, no se sienten repletas, aunque lo estén. Siempre hay un orden que nace de la alegría común, gente jugando voley, otros corriendo, tomando un baño, respirando mar... todo en su lugar.
Las playas: Copacabana, la nuestra. Al lado Ipanema, más allá Leblón, abajo del Pao de Açucar, Botafogo, una más bella que la otra, rodeadas de esbeltas cosntrucciones, lujo, montañas y luz.
En las noche (no todas, hay que preguntar), caminar por la Beira Mar de Copacabana es visitar una galería de arte popular. Artesanías cariocas, cuadros, ropas y todo a precio muy humano (aquí no sea abusa del turismo). Buen lugar para comprar recuerdillos.. lamentablemente no lo hicimos, no teníamos más de 5 reales en el bolsillo. Nos dijeron por allí que en Río es mejor movilizarse con poco dinero debido a los asaltos y robos constantes..., nunca vimos algo inseguro, ni nos sentimos expuesto....., la gente a veces envenena con miedo la cabeza de los inexpertos.
Río de Janeiro merecía más días, será para la próxima, hay que volver a mirarla mejor, pero con más dinero, Río esta bien carioca, literalmente.



Salvador de Bahía


12 horas y 99 reales nos llevaron a Salvador de bahía, primera capitaldel Brasil, cuna de la tradición negra, tierra de Orishas y del Capoeira..., siglos de historia.
La ciudad se prepara para el carnaval. Imponentes banners muestran en cada esquina de la ciudad rostros negros, la imagen del poblador Bahiano en cada esquina... sus sonrisas, sus gestos, sus miradas... la ciudad en estas fechas se transforma en una galería fotográfica gigante... la muestra con las cara de Bahía esta dispuesta por todas sus calles.
El casco historíco de Bahía es bello... uno puede pasar del centro antiguo al centro moderno en ascensor, historia a modernidad, arquitectura antigua a zona comercial, en ascensor. Centimos de real y un colosal elevador lo traslada a uno de zona a zona, dificil de describir, raro, hay que verlo, a visitar Salvador.

Isla de Itaparica, Salvador de Bahía.


La historia cuenta que en esta bella isla, a 45 min. de lento viaje desde Salvador, fue el punto de "engorde" para los esclavos que llegaban en cruel viaje, hacinados en los barcos de viles comerciantes de vidas. Quienes aguantaban el cruce del Atlantico eran acicalados y cebados para su próxima venta en Salvador.
Inicios oscuros para un lugar de naturaleza iluminada. Sus playas son hermosas, calmas... ya demasiado. Fueron dos noches aquí. El cruce desde el continente costó solo tres reales, el hospedaje fue menos amable con el bolsillo 30 reales con regateo, pero bueno, frente al mar y habitación bastante buena, tanto que hasta los zancudos la preferían... La posada de Charlie, un argentino buena onda con mas de 15 años aquí. Amor al mar y sus cejas verdes.
Como decía, fueron días muycalmos, descanso y mar. Nos quedamos en Praia do Areia, la mejor zona de la isla para el baño y asoleo, perono para la mirada histórica. El centro de Itaparica, luego de 45 min por la playa, aparece majestuoso. Casas antiguas muy bien conservadas, pequeñas iglesias y plazoletas... se continua el camino y aparecen casas de lujo, clubs de yates y condominios. Años atrás, Itaparica fue todo un boom turístico, ya no. Toda la movida turística parace haber mudado su ruta hacia Morro de Sao Paulo, isla a un par de horas más de camino. Allí esta la juerga, en Itaparica quedo la tranquilidad. Lo que no cuadra es qu elos precios sigan al famtasma de antaño... y ano es el point pero a los precios de restaurantes y hoteles parace no importarle, todo caro..., y bueno, para el que busca relax, es buen lugar, a pagar.
De Itaparica regresamos a Salvador, horas de buses de ciudad (bastante vueltas, bastante grande la ciudad también) llegamos a Stell Maris, zona de playa bastante adinerada. Acá nos esperaban sandra y Vivian. Con ellas, amables anfitrionas y mejores amigas, recorrimos buena parte de la ciudad.
Noche de sueño corto y al aeropuerto para volar hacia Río de Janeiro.

Pre carnavalon en Olinda



Casi como el carnaval, comparsa, música, alegría, disfraces, carros y baile, trago en cantidades fraternales y mucha fiesta, mucha gente... todo igual, la diferencia?, la fecha, domingo 4. Fue la práctica pre carnaval en Olinda (cualquier excusa es buena, lo importante es festejar).
De todas las ciudades de Brasil en que hemos estado, esta nos ha parecido la más fiestera, o bueno, será que nuestros anfitriones, Marcia y Jairo, conocen y comparten toda la fiesta y su recorrido en la ciudad.

El balcón de la casa de Marcia es un fisgón afortunado. Desde él se ve todo el carnaval, las comparsas en pleno, la alegría de los fiesteros, mejor lugar imposible. Beira Mar de Olinda, frente a las turquesas aguas y a sus grises tiburones (hay carteles de precaución, pero solo de eso sirven, la gente igual se da su chapuzón... raro que un pescaducho de esos ataque... raro pero posible, allí el cartel).
La fiesta no solo fue en la calle. Jairo y Marcia, días antes, tenían todo organizado para un gran fiestón, 40 afortunados observarían el espectáculo desde terraza privilegiada. 40 personas y 5 cervezas (calculo mínimo y bondadoso) por cada una, multiplicado por 4 horas de jolgorio, dos platos de feijoada (muito bom, buena mano Jairo)... santa mezcla, genial... buena organizacón fiestera. Todo bien, salió perfecto.. si bien recuerdo... o hasta donde puedo recordar (había gente qu eno tomo parte de sus 5 cervezas, yo los ayude a cumplir la cuota).
Un abrazo enorme, del tamaño de Brasil, para jairo y Marcia, otro más para el amigo "puto". Ya extrañamos Olinda, hay que volver.

sábado, 3 de febrero de 2007

Olinda y Recife


Ahora estamos en Olinda... Recife esta al lado.
Olinda es más tranquila, más pequenha y mas fiestera... mucho. Recife esta a 10 min en bus, si uno no mira con atención los letreros, ni cuenta se da que es otra ciudad, otro municipio, Son ciudades hermanas, separadas solo por los impuestos. Recife tieme más actividad comercial, grandes tiendas y centros comerciales, playas algo buenas y TIBURONESSSSSSSSSS... Oindatambién.... tubarao come bunda, ouch. El Centro antiguo, Marco Zero, en Recife, Capital de Pernambuco, es muy bello, buenos museos y demasiadas iglesias en cada esquina.... realmente impresionante... muchos pecadores o muchos religiosos recalcitrantes... a lo mejor lo primero, muita festa no brasillllllll!!!!.
El centro es una isla, uno no se da ni cuenta hasta qu emira un mapa... esto es algo habitual en el nordeste... tambien lo vimos en san Luis. Grandes y fortachones puentes unen la isla con el Recife moderno. Es necesario conocer acá la Casa de la Cultura (2 reales) y el barrio antiguo, el mercado do Sao Luis y sus artesanias y comercio y uno que otro museo (hay varios, no vean lo religiosos, imágenes muy tristonas).
OLinda es más pequenha, sus playas son mas para mirar y caminar que para banharse, aunque yo valiente playero lo hice, tiburón chupate esa.
Ha sido sede de la cultura anhos atrás y ostenta el título de ciudad patrimonio de la humanidad. Con todo derecho, su centro historicos es hermoso. La gente acá sale más ala calle, por lomismo q es mas tranquilo. Acá hay sienpre algo que hacer en la noche, fiesta todos los días, música regional en un local y al lado electronica, bailadores callejeros y serenatas al paso, realmente bueno. La gente respira felicidad. Nos estamos quedando en casa de Jairo y Marcia, los mejores anfitriones de Olinda, gente buena en extremo, trabajan, y bailan, trabajan y bailan, y siguen bailando, gentre muy festiva, buena y alegre... alojan personas de todo el mundo, aman las diferencias, no van a buscarlas, prefieren tenerlas en casa. Estamos ahora en su casa, peruanos, argentinos e ingleses, y en los dias que vienen vendran australianos, gringos y suecos... el ambiente de lo mejor, son los mejores anfitriones, mejores amigos y buenos guías.. con amistad se conoce mejor.
Ya tenemos 5 noches aquí... no no sdejan irnos hasta que se inaugure el carnaval!!!!! eso es manhana, será muy bueno, acá todos se prepararan, sobre todod nuestros nafitriones, hab´ra fiesta ne la casa... como plus final, ellos vian frente al mar.. hermoso, y yo también, por ahora.

Pipa, muita praia


Nos quedamos 5 noches en Pipa. Genial. Una playa hermosa. Los acantilados abrazan una orilla cálida y de arena fina... el agua tiene un color que enamora, caliente, cosa común en todas las playas del nordeste brasilero, genial. Nadamos con delfines, sin broma, bueno, cerca de ellos, a tiro de piedra como dicen los malditos... los vimos correr olas y creer el la bondad del hombre. Algo inolvidable. Pipa queda a 20 min de Tibau do sul y a 4 de natal.
En la noche, luego de Natal, partimos para Pipa. El pasaje de Fortaleza a Natal, nos costo 61 reales, despues para pipa solo 8.50, esta solo a 4 horas de Natal.
Si sigo mi mala costumbre de comparar, le aconsejaría al viajero, que vaya para Pipa en vez de Jericoacoara..... algo menos de fiesta, pero la misma intensidad bailonguera, y mucho mejores playas, si no preguntemosle a los delfines.
Viajando con 2 argentinos cordobeses, muy buena onda (tanto así que seguimos juntos hasta ahora, en Olinda) alquilamos un segundo piso en una casa con vista al mar, no muy cerca de la playa pero con vista al mar... por el precio que pagamos.... un regalo con vista al mar. Como toda playa turistica, los precios del hospedaje no bajaban de 25 reales, con gringo al lado y banho común. Nosotros pagamos 20 por cabeza... solo que era contrato por 5 dias.. pero bueno, valía la pena, lugar genial Pipa. Depa grande, 4 camas, cocna, vajilla, balcon y hamacas.. imposible conseguir algo mejor.
La playa principal de Pipa, a hora buena, tiene aguas mansas y pozas de agua que parecen piscinas... para el dormilon submarino es el paraiso. Despues, al sur, hay un aplaya solitaria y muy hermosa vigilada por los acantilados, su nombre es Gofinhos (delfines para el amigo falador espanhol)... no hay delfines acá, solo lleva el nombre, los delfine sprefieren estar con la gente el la playa que sigue, Madeiros.... muy bella, aunque menos que la anterior en facha, pero maás por la companhia delfinuda. Uno llega acá caminando 45 minutos entre costas y penhascos (no se recomienda caminar en sandalias ni en estado borrachoso... habla la experiencia) o en un bus quedemora 8 minutos y cuesta 1.5 reales.
Pipa, realmente recomendable, MUITO.

Natal, el fuerte de los Reyes Magos y sus amables playas


Dejamos Fortaleza en la noche y partimos para Natal, muy buen lugar, fue una visita rápida pero muy mirona. Dejamos las cosas en el rodoviario y nos fuimos directo para las playas y el centro. Muy buenas. Ahi conocimos el Fuerte de los Reyes Magos, ahora un museo de sitio. Esta banhado por las aguas turquesas y sus antiguos canhones son testigos de cientos de anhos de historia. Fundada por portugueses fue invadida y ocupada por holandeses luego. Indios y Portugueses lucharon juntos contra los holandeses y bueno, la historia es portuguesa.... y los indios ya ni se les ve por aca, la ley del mas fuerte.
Fuimos la playa do Punta Negra, larga pero mansa, sin viento y muy amable, atras los edificios afortunados, vigilando las orillas, cosa comun en todas las beira mar do brasil.